¿Hay diferencia de actitudes entre países pobres y ricos?

Las diferencias entre países ricos y pobres no se encuentran en la antigüedad del país, ni en los recursos naturales con los que cuentan, tampoco en la inteligencia y ni siquiera en la raza. La diferencia se encuentra en la ACTITUD de las personas en las diferentes sociedades que componen nuestro mundo actual.

En cuanto a la antigüedad, podemos observar a países como India y Egipto, que tienen miles de años de antigüedad y son pobres. En cambio, Nueva Zelanda y Australia son, sin embargo, países que hace 150 años eran casi desconocidos y que, en la actualidad, son países desarrollados y ricos.

En cuanto a la situación con respecto a recursos naturales, Japón cuenta con un territorio muy pequeño en el que el 80% del terreno es montañoso y no apto para la agricultura y la ganadería. Sin embargo, es la segunda potencia económica mundial pues su territorio es como una inmensa fábrica que recibe materiales de todo el mundo y los exporta transformados logrando así su riqueza.

Tampoco la inteligencia de las personas es la diferencia como lo demuestran estudiantes de países pobres que emigran a países ricos para estudiar, logrando unos excelentes resultados, o como los ejecutivos de grandes empresas, que cuando los oímos hablar, nos damos cuenta de que casi no hay diferencia intelectual.

Tampoco la raza es escusa para diferenciar a unos de otros, ya que cada uno, sea de la raza que sea, puede lograr los objetivos que se proponga si emplea todo lo necesario para que dicho trabajo sea eficiente y exitoso.

Por lo tanto, donde podríamos ver una diferencia entre las sociedades de nuestro mundo es en la actitud de las personas. Al estudiar la conducta de las personas de los países ricos se descubre que la mayor parte de la población sigue las siguientes reglas:

1. La Moral como principio básico. 
2. La Honradez. 
3. La Responsabilidad. 
4. El Respeto a la ley y los reglamentos. 
5. El Respeto por el derecho de los demás. 
6. El Deseo de superación. 
7. Su Amor al trabajo. 
8. Su Afán por el ahorro y la inversión. 
9. El Orden y la Limpieza. 
10. La Puntualidad. 

¿Necesitamos más leyes? No, sería suficiente con cumplir y hacer cumplir estas 10 simples reglas. No somos pobres porque a nuestro país le falten riquezas naturales, o porque la naturaleza haya sido cruel con nosotros, simplemente nos falta carácter para cumplir estas premisas básicas de funcionamiento de las sociedades.

Fuente: http://blog.pucp.edu.pe/item/123937/arquitectura-del-bienestar-en-convivencia